INCERTIDUMBRE SOBRE EL FUTURO ECONÓMICO DEL PAÍS

En agosto de 2011, meses antes de que se celebrasen las elecciones generales en el país, se llevaron a cabo negociaciones para evitar el techo de la deuda estadounidense. Con el fin de intentar solucionar el problema del déficit público, se acordó que se aprobarían recortes en el gasto federal si la Casa Blanca y el Congreso no llegaban a un acuerdo

Virginia Ruiz, Madrid.

El presidente ofreciendo una rueda la rueda de prensa.

El día 31 de diciembre finaliza el plazo para que el Partido Demócrata y el Republicano lleguen a un acuerdo. Éste día también se superará el techo de deuda aprobado por el Congreso. La negociación con el bando republicano en el tema presupuestario se ha hecho difícil. El Congreso se encuentra fragmentado y no es capaz de aprobar un plan conjunto, los conservadores siguen en la idea de no subir los impuestos, ni siquiera a los más ricos.

Según advirtió la Oficina del Presupuesto del Congreso, dichos recortes podrían aumentar el desempleo del país por encima del 9% y poner en peligro la recuperación de la economía. La posición de Obama es mantener los recortes de impuestos a aquellas familias con una renta inferior a 250.000  dólares anuales, pero esto reduciría la recaudación de ingresos públicos. Por ello, Obama propone equiparar lo que pagan las rentas más altas a lo que pagan las clases medias.

Aunque el presidente del país, Barack Obama es demócrata, la mayoría de los miembros de la Cámara de Representantes son republicanos. La falta de un acuerdo está teniendo consecuencias negativas  en la Bolsa de Nueva York, el índice Dow Jones había bajado ya del límite de los 13.000 puntos. Además muchos inversores pronostican que lo que está sucediendo durante estas semanas afectará al consumo y a la recesión si el país llega al abismo fiscal.

Si finalmente esto sucediese, los demócratas tendrán una subida de impuestos en los más ricos, y los republicanos, verán recortados en 55.000 millones los gastos sociales. La credibilidad de Estados Unidos está en duda y la crisis en el gobierno se está haciendo visible en todo el mundo.

Senado de Estados Unidos.

Para tratar de evitar el abismo fiscal, existen dos opciones, la primera es que Reid (líder de la mayoría demócrata en el Senado) y McConnell (líder de la minoría republicana en el Senado) lleguen a un acuerdo votado el domingo por el Senado y ratificado el lunes por la Cámara de Representantes. La segunda es que McConnell y Boehner  aprueben que el plan de Obama sea votado en ambas cámaras, para que logre el respaldo de una veintena de congresistas republicanos.

Varios medios estadounidenses informan de que los demócratas esperan que los republicanos ofrezcan en el que expirarán las exenciones impositivas que se aprobaron durante el gobierno de George W.Bush aumente a los 400.000 dólares. Y que como compensación, los republicanos pueden exigir que se rebajen los impuestos estatales.

Obama afirma que es necesaria una responsabilidad común, y que el Partido Republicano debe tomar parte para evitar una nueva crisis económica generada por razones políticas, dice que es necesario que Reid y McConnell leguen a un acuerdo en el Senado. Se espera que el acuerdo entre Congreso y Senado finalice el domingo 30 de diciembre.  Mientras tanto, la nación espera con incertidumbre lo que pueda pasar en el nuevo año.

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